“El 8 de enero de 1959, Fidel hablando en Columbia, las palomas blancas, el pueblo ávido por escucharlo. Aparte de la interpretación que dieron muchos creyentes a aquel momento mágico, las imágenes parecen extraídas de los antiguos mitos y epopeyas”, resaltó el escritor en su cuenta de la red social Twitter, refiriéndose al discurso del jefe militar a su llegada a La Habana.
Este domingo, jóvenes y dirigentes estudiantiles escenifican el hecho histórico en diversos puntos de la ciudad donde el líder guerrillero detuvo la Caravana de la Victoria para dirigirse a los habaneros que salían a recibirlo.
Durante semanas en el país se realizaron actos similares para evocar el acontecimiento que constituyó uno de los primeros puntos de contacto entre la nueva dirigencia que asumía el poder y el pueblo.
En La Habana, Fidel habló al pueblo en varias ocasiones, se entrevistó con artistas a su paso por la actual sede del Instituto Cubano de Radio y Televisión y finalmente tomó posesión del cuartel Columbia, hoy convertido en la ciudad escolar Libertad.
Con este suceso finalizaba la etapa insurreccional de la Revolución Cubana que condujo a la huida del dictador Fulgencio Batista y se iniciaba una de consolidación del movimiento de liberación nacional para abolir el aparato corrupto y represivo e instaurar un nuevo orden.
A partir de ese momento, como señalara el propio Fidel, todo sería más difícil.
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