La pasada medianoche se concretó el revés del proyecto del partido neoliberal Fuerza Popular de realizar las elecciones presidencial y parlamentaria el 8 de octubre, la segunda vuelta en noviembre y la instalación de los elegidos el primer día de 2024.
Parecía con ello abrirse posibilidad de cambiar la fecha de los comicios adelantados aprobada en diciembre para abril de 2024, y condiciones para que amaine la protesta reiniciada el 4 de enero.
Sin embargo, el resultado de 65 a favor y 45 en contra frustró la iniciativa, lo cual, en muchos casos se debió a resistencias a dejar el Legislativo cuyo cierre reclaman los manifestantes.
Las bancadas de Renovación Popular y Avanza País, pese a integrar un bloque de derecha extrema con Fuerza Popular, votaron en contra alegando que fueron elegidos hasta 2016 y que no deben atenderse los reclamos de quienes calificaron de violentistas.
El Partido Perú Libre, de izquierda, votó en contra porque los promotores del proyecto no aceptaron incluir en los comicios un referendo sobre la pertinencia de una asamblea constituyente, otra demanda de las protestas, y denunció una maniobra de Fuerza Popular a favor de sus intereses.
En la mayoría de las bancadas hubo votos a favor y en contra del proyecto a la postre derrotado, aunque un pedido de reconsiderar la votación quedó pendiente para el lunes próximo.
Tras el resultado, el presidente de la Asociación de Movimientos Regionales del Perú, Fredy Vracko, pidió que la presidenta Dina Boluarte retire al influyente primer ministro, Alberto Otárola, por no tender puentes de diálogo ante el conflicto social.
Vracko pidió la medida como “una muestra de apertura al diálogo, retirando a quien nos parece el elemento que no genera las posibilidades de tender puentes de diálogo”.
Sugirió que el diálogo podría estar a cargo del presidente de la Asamblea Nacional de Gobiernos Regionales, Rohel Sánchez de la sureña región de Arequipa, porque Otárola no es apto para dialogar.
El primer ministro ha sido además acusado en la prensa de impedir la renuncia de Boluarte de las primeras muertes en las propuestas, en diciembre pasado y sabotear una iniciativa de la mandataria para apurar los comicios adelantados.
De otro lado, el diario Uno afirmó hoy que Otárola habría perdido la confianza de Boluarte, quien lamentó el resultado de anoche. El rotativo señaló contradicciones entre ambos, como la apertura de la presidencia al mayor adelanto de los comicios y el rechazo público de Otárola al proyecto frustrado anoche.
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