Los participantes acordaron un plan de acción en el que expresan su militancia por la justicia social y afirman que su trabajo no es para acrecentar currículos académicos, sino para participar en el debate por un mundo mejor posible y necesario.
“Abogamos por la unidad en la diversidad en los más amplios sectores de la izquierda revolucionaria en cuatro frentes básicos: el anticapitalismo, el antimperialismo, el antifascismo y la justicia social», significaron.
Rechazaron la implementación de medidas coercitivas unilaterales, “en particular aquellas que se ejercen contra los procesos revolucionarios de Cuba, Venezuela y Nicaragua, y otros gobiernos progresistas de América Latina y el Caribe”.
Acordaron crear un grupo de editores que se articule con la Red en Defensa de la Humanidad y mantener de forma permanente la denuncia del carácter genocida y violatorio del derecho internacional del bloqueo de Estados Unidos contra Cuba.
Apoyarán y difundirán “la realización en Bruselas de un Tribunal Internacional contra el Bloqueo en el último trimestre de 2023”.
Decidieron respaldar a partir de este año, cada 21 de febrero, el Día del Libro Rojo (aniversario del Manifiesto Comunista) y la realización de una gran movilización por la paz en los países participantes en el encuentro.
De igual forma concertaron denunciar y combatir el neocolonialismo cultural, defender la memoria histórica, así como rescatar y difundir la obra de los próceres por la independencia de los pueblos del Sur.
También pactaron la creación de una biblioteca digital con lo mejor del pensamiento de izquierda, al tiempo que identificarán capacidades de impresión que permitan incrementar la circulación de sus publicaciones.
Para ello, utilizarán plataformas digitales existentes y otras que puedan ser creadas para su difusión popular, además de estrategias comunicacionales comunes.
Asimismo, acordaron implementar programas de investigación sobre los desafíos de la izquierda ante la guerra mediática del imperialismo e impartir cursos de formación relacionados con estos temas.
Otra decisión se refiere a “identificar y compartir fuentes de financiamiento alternativas para la sostenibilidad de los proyectos editoriales contrahegemónicos y conformar un fondo internacional para la comunicación de nuestros pueblos”.
La próxima edición del Encuentro Internacional de Publicaciones de la Izquierda tendrá lugar en noviembre de este año en Caracas, mientras que en febrero del 2024 volverá a realizarse en La Habana la cita, en rechazo a la Doctrina Monroe y en homenaje al 65 aniversario del Triunfo de la Revolución Cubana.
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