Esta postura fue expresada en la sesión de clausura de la trigésima cuarta Conferencia de la Unión celebrada en Bagdad la capital iraquí, cuya declaración final fue citada por los principales medios de prensa sirios.
Es necesario que Siria vuelva a ejercer su importante rol en los escenarios árabe, regional e internacional, manifestó el comunicado, y agregó que los reunidos decidieron formar una delegación parlamentaria árabe para confirmar el apoyo a Damasco que enfrenta las secuelas del terremoto.
En su intervención, el presidente de la Asamblea del Pueblo de Siria, Hamouda Sabbagh, llamó a las federaciones y órganos parlamentarios regionales e internacionales y a los Estados miembros de las Naciones Unidas a ejercer presión sobre los países occidentales para que levanten de inmediato su bloqueo económico.
Las medidas económicas coercitivas agudizaron la tragedia del pueblo sirio y provocaron escasez de equipos y suministros necesarios para las operaciones de socorro y rescate, además, afectaron todos los aspectos de la vida económica, social, educativa y de salud, denunció el jefe del legislativo.
Aclaró que Siria enfrentó guerras y bloqueo, sin embargo, no cambió ni cambiará sus posiciones y principios.
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