La obesidad debe convertirse en una gran causa nacional el año próximo, reclamaron los firmantes en un editorial publicado por el semanario Le Journal du Dimanche, de cara a la celebración, el 4 de marzo, del Día Mundial de la Obesidad, creado para alertar sobre el riesgo de esa condición y del sobrepeso. De acuerdo con la coalición, urge en Francia una movilización con todas las energías, de profesionales de la salud, investigadores, asociaciones de pacientes y poderes públicos, en aras de prevenir y lidiar mejor con el fenómeno, así como abordar sus causas y complicaciones.
Consideramos que ante una enfermedad tan multifactorial, la acción pública resulta primordial y debe intensificarse, subrayó al advertir que la hoja de ruta nacional para enfrentar la obesidad entre el 2019 y el 2022 fue un paso importante, pero “careció del seguimiento a las acciones y los medios”.
En ese sentido, consideró que resta mucho por hacer ante un problema con un impacto significativo desde enfoques médicos, económicos y sociales.
Según estudios, en suelo galo las personas obesas se duplicaron en las últimas dos décadas, pasando de un 8,5 por ciento de la población en 1997 a un 17 en 2020, lo que representa ocho millones 500 mil franceses.
La coalición también instó a declarar la obesidad una enfermedad crónica, para acelerar los esfuerzos de prevención.
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