La artista norteña consideró un honor que la cita se dedicara al cine independiente en su país y una manera también de condenar el bloqueo económico, comercial y financiero que desde hace más de 60 años afecta la vida en el archipiélago.
En la penúltima jornada de la cita fue exhibido en la Universidad de Oriente el documental Haciendo posible lo imposible, de Sporn, en el cual se muestra la campaña desarrollada por estudiantes durante las décadas de los 60 y 70 del pasado siglo por abrir un centro de estudios puertorriqueños en Nueva York.
Otra pieza apreciada en la institución docente fue La batalla de los puentes, del venezolano Carlos Aspurúa, que se sumó a otros documentales programados en la cita y a las conferencias impartidas acerca de ese género cinematográfico.
La presentación de Soberanía, de Alejandro Gil, en el Laboratorio Farmacéutico Oriente, fue emotivo momento por su contenido relacionado con las vacunas creadas por científicos cubanos para contrarrestar la Covid-19.
Junto a la muestra de 14 obras de los realizadores independientes de Estados Unidos, que en cifra superior a los 30 integrantes formaron la delegación, fueron puestos también a disposición del público realizaciones de México, España, Países Bajos y Austria.
Esta edición rindió homenaje a los 30 años de la Televisión Serrana y a los 45 de la filial de la Unión de Escritores y Artistas, junto al tributo mayor a la trayectoria de Santiago Alvarez, que cumpliría 104 años en esta fecha.
Las salas Rialto y las de los poblados de El Cobre y El Caney, junto al Museo de la Imagen y el Teatro Macubá, fueron los escenarios principales del evento que tuvo en el barrio de San Juan una acción comunitaria con un documental dedicado a la faceta como alfabetizador del trovador Silvio Rodríguez.
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