La medida, anunciada por el Ministerio de la Función Pública, afecta a los teléfonos de trabajo de 2,5 millones de funcionarios, y en relación con las aplicaciones incluidas el comunicado aseguró que “no cuentan con niveles suficientes de ciberseguridad y protección de datos para ser desplegadas en equipos gubernamentales”.
“Esta prohibición se aplicará sin demora y de manera uniforme», añadió la nota, aunque se concederán excepciones «para necesidades profesionales como la comunicación institucional de una administración».
A falta de una lista de aplicaciones «firme y definitiva», fuentes ministeriales explicaron a Franceinfo que se trata de tres grandes categorías: «recreativas», de «juegos» como Candy Crush, y de «streaming» como Netflix.
Si bien los teléfonos personales de los funcionarios no se verán afectados por esta medida, el ministro de Asuntos Digitales, Jean Noël Barrot, precisó que “el Gobierno tiene el deber de proteger a Francia contra cualquier posible ataque a su seguridad y soberanía”.
Francia sigue los pasos de Estados Unidos, Canadá, Reino Unido y Bélgica, que en nombre del principio de precaución prohibieron TikTok en los teléfonos móviles de funcionarios del Estado y miembros de sus gobiernos, pero ampliando de forma importante el número de aplicaciones que pueden resultar sospechosas.
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