En la reunión, celebrada en el Palacio de la Revolución, Marrero llamó a exigirle más a todos los implicados en la cadena de mando porque muchas veces quienes tienen que estar todos los días incidiendo en determinados temas no lo hacen con el nivel requerido. “No logramos nada con que los cuadros principales estén rodilla en tierra, si los demás no están con el mismo sistema, con el mismo nivel de compromiso y de convencimiento de la responsabilidad que les asiste con el pueblo y con la solución de los problemas” sentenció el jefe de Gobierno.
Por su parte la ministra de de Finanzas y Precios, Meisi Bolaños, manifestó la urgencia de que las direcciones de ese sector, como rectoras de la actividad en municipios y provincias, desempeñen las funciones que les corresponden.
La titular orientó, además, identificar en cada territorio aquellos productos y servicios que más quejas de la población suscitan y regularlos a través de la concertación, con un llamado a los distintos actores económicos a que hagan una revisión integral de sus precios.
Enfatizó en la necesidad de aumentar el rigor en las medidas contra aquellos que aplican precios abusivos y especulativos, dígase el cierre de establecimientos, el decomiso, y el control del cobro de las multas de altas cuantías.
Según la publicación, en el encuentro también se debatió sobre la marcha de la reestructuración de las administraciones locales, a partir de la máxima de reajustar y precisar con total claridad las funciones y atribuciones de cada cargo.
Fue abordada también la compleja situación de los combustibles, escenario que, en palabras del jefe de Gobierno, obliga a ser más exigentes y estrictos en la organización y el control, a establecer prioridades y a definir estrategias oportunamente.
Marrero también insistió en la prioritaria producción de alimentos, tema que demanda actualizar los indicadores de la agricultura urbana, suburbana y familiar, y desarrollar iniciativas concretas que motiven a las personas a sembrar y criar en sus patios.
En cuanto al programa de medicina natural y tradicional, el cual adquiere mayor protagonismo ante las fuertes limitaciones con los medicamentos, orientó la creación de organopónicos solo para este fin y la rehabilitación de laboratorios.
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