Víctor Julio Cabrera, directivo de la entidad empresarial, destacó que el producto de esta zona -Sancti Spíritus, Villa Clara, Cienfuegos y Ciego de Ávila- reúne buenos colores, grasa y elasticidad, resultado de la disciplina tecnológica de productores y los centros de beneficio.
Trascendió que en la actual campaña 101 productores de cuatro municipios se dedican al tabaco tapado, los cuales deben aportar unas 80 toneladas de capas para el torcido de exportación.
La víspera en la escogida de Zaza del Medio, una de las tres existentes en la provincia para la clasificación, se desarrolló un ejercicio demostrativo del planteo, proceso muy técnico y determinante en la selección de la capa.
Cabrera explicó que esta actividad persigue unificar todas las clases de tabaco en el país, así como trazar la línea a seguir en la preindustria de una forma pareja en el país.
Un paso dirigido a las escogidas, a los centros donde se beneficia el tabaco y en el que participan los especialistas de las empresas, los revisadores de los centros y los productores, añadió.
El planteo, analizó, es el inicio de la etapa de beneficio posterior al cultivo, un paso inaplazable, porque ninguna campaña es igual, hay diferencias en la calidad y los colores que salen de la curación.
Es un proceso hoja a hoja, abrirla, estirarla, alisarla, mirar las dos bandas y ver las características que tiene para poderla colocar en una de las clases que se determine.
Una labor de artistas, ensueños y de dedicación donde se recoge el fruto del sacrificio y la dedicación de los vegueros en sus cosechas, precisó.
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