“Mambisa un candidato vacunal contra la Covid-19 atractivo por las ventajas de su administración por vía nasal, que no requiere necesariamente un personal sanitario calificado para su aplicación, y pudiera resultar de interés sobre todo como refuerzo”, resaltó el CIGB en un mensaje en la red social Twitter.
Mambisa logró que más del 70 por ciento de los voluntarios participantes del estudio clínico incrementaran en cuatro veces sus títulos de anticuerpos.
Gerardo Guillén, director de Investigaciones Biomédicas del CIGB subrayó que Mambisa cumple con el criterio de éxito del ensayo, pues el 80 por ciento de los voluntarios ya alcanzó los niveles previstos de respuesta.
En resumen, expresó, el 96 por ciento exhibe un nivel alto de protección tras recibir el beneficio del inmunizante.
Asimismo, agregó que en el caso de Mambisa se comprobó la inducción de células de memoria específicas de la mucosa nasal.
Esto permite prever que la vacuna contribuye con una inmunidad esterilizante, es decir, además de impedir la severidad o la sintomatología de la infección, corta la transmisión, uno de los objetivos fundamentales de las vacunas nasales.
Menos de 15 vacunas vía nasal antiCovid-19 se desarrollan en el mundo, y la mayoría se encuentran en etapas tempranas de evaluación clínica.
Mambisa, gestada por el CIGB, resulta una combinación de dos proteínas recombinantes: la RBD de la espiga del SARS-CoV-2 y la de nucleocápsida del virus a la hepatitis B.
Cuba aplica desde 2021 la vacuna Abdala, fabricada por esa misma institución, y la primera concebida y producida en Latinoamérica, con una eficacia demostrada del 92,28 por ciento.
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