En el tenso escenario político y social por la ya promulgada reforma de la jubilación, los sondeos sobre la aceptación a la labor del mandatario se suceden, todos con un resultado similar, esta vez en una pesquisa realizada por BVA para la cadena RTL.
Las entrevistas tuvieron lugar después de la comparecencia de Macron el lunes en la televisión nacional para defender la reforma y pedir a los actores sociales pasar la página y encarar nuevas prioridades, un llamado que rechazaron los sindicatos y partidos opositores.
Según la nueva encuesta, desde marzo el jefe de Estado perdió dos puntos de popularidad, y con un 26 por ciento iguala su peor momento en el Palacio del Elíseo, que se remonta a los meses de octubre y noviembre del 2018, cuando estalló el movimiento de los Chalecos Amarillos contra el alza del impuesto a los combustibles.
Sondeos de Elabe y del Instituto Francés de Opinión Pública (IFOP) para diversos medios reflejaron en los últimos días un panorama similar, ante el cual el presidente asegura estar dispuesto a enfrentar el precio de sus proyectos.
El lunes, Macron asumió que la reforma con su extensión de la edad de retiro de 62 a 64 años es impopular, pero insistió en que es necesaria para “salvar” el sistema de jubilación por repartición.
Asimismo, el mandatario realizó el miércoles y el jueves recorridos por localidades en el sureño departamento de Hérault y la nororiental región de Alsacia, donde pese a las protestas, ofreció una imagen de líder cercano a la gente, ayudado por las cámaras de televisión.
En la encuesta de BVA para la cadena RTL también cedió la popularidad de la primera ministra Elisabeth Borne, quien con un 27 por ciento de aceptación lidia con el mayor rechazo a su gestión desde mayo del año pasado, cuando asumió la oficina con sede en el parisino Hotel de Matignon.
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