Alemania.
La cancillería calificó el hecho como un “acto atroz de acoso e intimidación” y convocó al embajador germano aquí, Jurgen Schulz.
Nuestros periodistas fueron objeto de una denuncia falsa, afirmó el ministerio, que responsabilizó del hecho al denominado movimiento Gulen, considerado terrorista por Ankara.
La acción de Alemania contra la libertad de prensa, (…) revela su enfoque de doble rasero, concluyó la cancillería en un comunicado en el que asegura que Ankara tomó las iniciativas necesarias respecto al caso.
ro/ehl