La medida es parte del contrato de coalición de socialdemócratas, verdes y liberales, pero su implementación constó largos debates para lograr el proyecto de ley publicado hoy por el Ministerio del Interior.
Según el documento, los inmigrantes que deseen naturalizarse podrán hacerlo tras cinco años en el país, si cumplen los requisitos, en lugar de ocho como hasta ahora.
Además, los hijos nacidos en Alemania de padres extranjeros podrán optar a la nacionalidad si uno de los progenitores reside desde al menos cinco años en el país de forma legal.
En ambos casos se acorta el período vigente hasta ahora para acceder a tales beneficios.
Por otro lado, quienes obtengan la nacionalidad alemana no deberán por ello renunciar a su ciudadanía de origen como ocurre ahora.
El borrador acordado prevé además que se impida la naturalización de personas condenadas por delitos antisemitas, racistas, xenófobos o contrarios en otro modo a la dignidad humana.
Según datos oficiales, en 2021 vivían en Alemania 72,4 millones de ciudadanos nacionales y 10,7 millones de extranjeros, de los que poco más de la mitad reside desde hace al menos 10 años en el país.
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