De acuerdo con el Equipo de Respuesta ante Incidentes de Seguridad Informática, se trata de un ransomware (secuestro de datos) programa que encripta los archivos y bloquea los equipos para el robo de la información.
Ante esta situación, se ordenó al personal no encender las computadoras y desconectar los cables de red de internet e intranet, hasta que se levante la alerta. Esta es la segunda vez que la institución sufre una agresión de su tipo desde la perpetrada en septiembre de 2022 contra el Estado Mayor Conjunto (EMCO) de las Fuerzas Armadas.
En este último ciberataque, liderado por el grupo Guacamaya, fueron liberados más de 400 mil archivos del EMCO, entre ellos algunos referidos a la estrategia militar en la llamada macrozona sur o los programas en el norte destinados a controlar la migración irregular.
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