Las conclusiones del trabajo realizado la Salud Pública de Francia (SPF) mostraron que tras el descenso sin precedentes observado entre 2016 y 2019 (del 29,4 al 24 por ciento), el tabaquismo se estabilizó en Francia, y en la actualidad cerca de 12 millones de franceses adultos fuman diariamente.
Según la agencia sanitaria, el estrés asociado a la crisis sanitaria de Covid-19 podría haber tenido un impacto en la detención de la disminución de la prevalencia del tabaquismo, e incluso podría explicar el aumento observado en determinados sectores sociales.
El estudio mostró niveles de tabaquismo significativamente más altos entre las personas con niveles de estudios más bajos, variando entre el 30,8 por ciento de quienes no tienen cualificación o sus estudios son inferiores al bachillerato, y el 16,8 por ciento con niveles superiores al bachillerato.
Del mismo modo existe un mayor de prevalencia del tabaquismo entre el tercio de la población con ingresos más bajos (33,6%); y significativamente más elevada entre los parados (42,3%) que entre los empleados (26,1%) o los estudiantes (19,1%).
Con respecto al uso de los cigarrillos electrónicos, la encuesta señaló que un 41,2 por ciento de los adultos los probaron durante 2022, pero solo un 5,5 por ciento de los entrevistados los usan a diario, un porcentaje que permanece estable desde 2021.
Por último, un 59,3 por ciento de los fumadores diarios aseguraron querer dejarlo, pero solo una cuarta parte de ellos planean hacerlo en los próximos seis meses.
Los datos oficiales muestran que el tabaquismo sigue siendo la primera causa de muerte evitable en Francia, con más de 75 mil fallecidos, mientras que el cáncer sigue siendo la primera causa de muerte atribuible al tabaquismo.
mem/acm