El portavoz del Consejo de Seguridad Nacional aquí, John Kirby, puso en duda el reporte divulgado la víspera por The Wall Street Journal y consideró que no se ajustaba a la realidad.
“He visto ese informe de prensa. No es exacto”, dijo el funcionario a la cadena televisiva Msnbc.
También el vocero del Pentágono, Pat Ryder, descalificó la información.
“No tenemos conocimiento de que China y Cuba desarrollen ningún tipo de estación de espionaje”, señaló.
El texto inicial, reconocido hoy como una noticia falsa por el propio gobierno estadounidense, planteó que China y Cuba habían llegado a un acuerdo secreto que permitiría a Beijing establecer una instalación de espionaje electrónico en la isla.
Según el informe, esto permitiría al gigante asiático monitorear las comunicaciones en del sureste de Estados Unidos.
Tras las alegaciones del diario The Wall Street Journal, el viceministro de Relaciones Exteriores de Cuba Carlos Fernández de Cossío las catalogó de falsas y aseguró que son calumnias totalmente infundadas.
Calificó la información como “totalmente mendaz”, y subrayó que era una falacia promovida con la pérfida intención de justificar el recrudecimiento sin precedentes del bloqueo económico de Washington contra la nación caribeña y las campañas de desestabilización.
Se trata de engañar a la opinión pública de Estados Unidos y del mundo, remarcó el diplomático, y añadió que son mentiras fabricadas con frecuencia por funcionarios estadounidenses, “aparentemente familiarizados con información de inteligencia”.
En tal sentido puso como ejemplo las referidas a los supuestos ataques acústicos contra el personal diplomático norteamericano en La Habana, la falsedad sobre una inexistente presencia militar cubana en Venezuela y la mentira sobre la existencia imaginaria de laboratorios de armas biológicas.
“Con independencia de los derechos soberanos que tiene Cuba en materia de defensa, nuestro país es firmante de la Declaración de América Latina y el Caribe como Zona de Paz, suscrita en La Habana, en enero de 2014. En virtud de ella, rechazamos toda presencia militar foránea en la América Latina y el Caribe”, enfatizó.
China también exigió hoy a Estados Unidos no entrometerse en los asuntos internos de Cuba y lo acusó de propagar calumnias.
Wang Wenbin, vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores, denunció que difundir rumores y difamar se convirtieron en prácticas muy comunes de Washington, pues lo usa para inmiscuirse en cuestiones de otros países.
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