El promotor de la solidaridad con su país de nacimiento, consideró un honor estar otra vez en Quisicuaba y ser testigo de la obra de amor que ocurre en un barrio humilde de La Habana.
Lazo confesó sentirse muy orgulloso de traer, en esta ocasión, a estudiantes norteamericanos, a sus padres, maestros de Chicago y a integrantes de la Caravana de Miami contra el bloqueo a la isla caribeña, «para que vean el trabajo de amor y solidaridad que hacen aquí», argumentó a medios locales.
«Venir es nutrirse de algo tan lindo que se necesita en el mundo y que en Quisicuaba abunda: el amor y el hacer por el prójimo», abundó el activista residente en Estados Unidos.
Asimismo instó a amigos solidarios y a cubanos emigrados a conocer y aprender de este proyecto que reúne unos 30 programas sociales en beneficio de personas vulnerables socialmente.
El líder de la caravana Puentes de Amor, reafirmó además la importancia de la solidaridad hacia Cuba en un contexto difícil provocado por el hostil, cruel e inhumano bloqueo de Estados Unidos que castiga a las familias cubanas.
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