Al respecto, el director de Tecnología de Transporte de Vehículos Pesados de África, Paul Nordengen, expresó su convencimiento de que se necesitan intervenciones concretas para salvaguardar los camiones, los conductores y la economía del país.
Es trágico lo que está pasando en los últimos días, dijo. Desde un punto de vista económico, obviamente, el cierre de carreteras por los asaltos tiene un gran impacto en el movimiento de mercancías.
Muchos de los operadores de transporte, explicó, tienen contratos con márgenes de ganancias muy pequeños, por lo que cuando tienen retrasos, tienen un gran impacto en sus ingresos, especialmente en las empresas más pequeñas.
De su lado, el Sindicato de Trabajadores del Transporte y Afines de Sudáfrica (Satawu) manifestó en un comunicado que esos ataques equivalen a sabotaje económico.
Según reportes policiales, el número de camiones destruidos en ataques incendiarios en los últimos tres días aumentó a 16, después de que la víspera cinco vehículos de carga más fueran incendiados en las provincias de KwaZulu-Natal (sureste) y Limpopo (norte).
De ellos 11 fueron incendiados durante el fin de semana: seis en KwaZulu-Natal el sábado, y cinco en la oriental Mpumalanga el domingo.
En estos momentos, en Pretoria se realiza la 41 Conferencia de Transporte de África Meridional, que reúne a directivos y especialistas del sector de todo el sur del continente.
Por su parte, el portavoz de la policía de KwaZulu-Natal, Jay Naicker, reveló que las personas que participaron en el ataque a seis camiones el sábado por la noche en el paso de Van Reenens ya fueron identificados a partir de videos del incidente. mem/mv