Dos toneladas de ayuda humanitaria, en su mayoría medicamentos, trajeron consigo los 30 caravanistas, quienes proceden de varias ciudades de los Estados Unidos y cumplirán en los próximos días un amplio programa de actividades en las provincias de Guantánamo, Granma y Santiago de Cuba.
A su llegada a Holguín, Gail Walker, directora ejecutiva de la Fundación Interreligiosa por la Organización Comunitaria (IFCO-Pastores por la Paz), agradeció la cordial bienvenida y confesó lo sobrecogedor que resulta para ellos venir a este país y ser merecedores de tanto amor.
Walker hizo referencia al valor del trabajo de cada una de las personas que este día lograron estar aquí como parte de la Caravana, la cual representa lo mejor y el corazón de la mayoría de las personas de los Estados Unidos.
Asimismo resaltó que regresan a esta tierra, una vez más, para expresar su apoyo al pueblo de Cuba frente al genocida y dañino bloqueo que por más de seis décadas imponen los gobiernos de Estados Unidos contra la mayor de las Antillas.
“Cuba no está sola” aseguró Gail al referirse a las campañas mediáticas contra el país caribeño y a las declaraciones de políticos y dirigentes estadounidenses.
A nombre del proyecto, Walker recibió de manos de autoridades gubernamentales y políticas de la provincia, el Escudo y el Hacha de Holguín, máximas distinciones que se entregan a personalidades y movimientos destacados.
El grupo visitante cumplirá una variada agenda de trabajo en el municipio costero de Gibara, donde, entre otras actividades, sobresale el encuentro con integrantes de proyectos locales y representantes del Gobierno local sobre la protección de los ecosistemas.
Pastores por la Paz nació en 1988 como un proyecto de IFCO en respuesta a la agresividad en América Latina de la administración del entonces presidente Ronald Reagan.
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