Uno de los últimos puntos de su agenda fue el encuentro con el premier del gigante asiático, Li Qiang, quien instó a manejar adecuadamente las diferencias para devolver los lazos a la senda del desarrollo sólido y estable en una fecha temprana.
El primer ministro subrayó la importancia de que los dos países implementen el consenso alcanzado por los presidentes Xi Jinping y Joe Biden en Bali, Indonesia, el año pasado.
Sobre el enfrentamiento al cambio climático, Li apuntó que las naciones desarrolladas deben tomar la iniciativa en la reducción de emisiones y cumplir con sus compromisos financieros.
Asimismo, alentó a explorar mecanismos pragmáticos para la cooperación, promover el proceso multilateral de gobernanza climática y garantizar la implementación efectiva del Acuerdo de París de 2015.
De acuerdo con China Daily, Kerry expresó el deseo de Washington de una relación estable con China y manifestó la disposición de Estados Unidos de abordar conjuntamente los desafíos globales apremiantes.
Previamente, sugirió que la cooperación climática con Beijing podría marcar un nuevo comienzo para resolver las diferencias bilaterales.
Kerry arribó a Beijing en un momento en que las olas de calor -asociadas con el cambio climático- muestran cifras históricas en el mundo, en particular en China, Estados Unidos y Europa.
Además, el enviado especial es el tercer alto funcionario de la administración de Biden en arribar al gigante asiático en menos de dos meses, luego de la visita de la secretaria del Tesoro, Janet Yellen y del secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken.
Los expertos interpretan estos intercambios como un intento de ambas partes por distender los deteriorados lazos bilaterales, que han llegado a un punto crítico debido a desacuerdos en temas como Taiwán, derechos humanos y guerra económica.
oda/idm