El tramo de 173 kilómetros entre Moirans-en-Montagne y Poligny clasifica como media montaña por sus dos mil metros de desnivel, pero con apenas dos puertos discretos en su recorrido y una línea recta de más de siete kilómetros hasta la meta, que pudiera ser propicia para los esprínteres.
La etapa por sus características está abierta e incluso brindará perfil para alguna escapada, lo que sí es seguro es que no representa una amenaza –salvo un contratiempo mayor- para Vingegaard, quien en la contrarreloj del martes y en la despedida de los Alpes el miércoles extendió su ventaja sobre el esloveno Tadej Pogacar (UAE Team Emirates) a más de siete minutos.
Mañana será el último episodio del esperado duelo Vingegaard-Pogacar en la cordillera de los Vosgos, con cierta esperanza para el esloveno, aunque solo un milagro le devolvería la corona conquistada en la Grande Boucle en 2020 y 2021.
Por equipos, también la suerte parece echada a favor del Jumbo-Visma, que saca en la clasificación más de 15 minutos al UAE Team Emirates.
El cierre del Tour de Francia se producirá el domingo después de tres mil 404 kilómetros recorridos en la emblemática avenida parisina de los Campos Elíseos.
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