Para esta fecha Prensa Latina rememora precisamente una carta del líder de la Revolución cubana enviada al colectivo en el año 2014, donde hace un breve repaso de la fecha hace ya 34 años.
“Aquel 26 de julio de 1989, muchos de nosotros estuvimos en la Plaza de la Revolución Ignacio Agramonte, algunos ya como plantilla de este Centro, otros soñando con estar en él algún día.
“A todos por igual nos agradó la noticia de la inauguración de este Centro del mismo modo en que nos impactó la posibilidad de la desintegración de la URSS y la caída del campo socialista.
“De este modo teníamos una nueva tarea y la debíamos desarrollar sin la ayuda solidaria a la que siempre estuvimos acostumbrados.
“Ante este escenario, el bloqueo se recrudeció y nuestra naciente industria ha tenido que desarrollarse utilizando equipos e insumos capitalistas, no en pocos casos norteamericanos. Nuestro pueblo tiene que pagar por ellos más del doble de lo que le cuesta a cualquier otro país”.
Resultaría la última vez aquella en la que el Comandante en Jefe del pueblo antillano estaría por la región que enlaza el centro con el oriente de Cuba, para no sólo celebrar el Día de la Rebeldía Nacional, sino además recordar que el futuro del país tenía que ser precisamente un porvenir impulsado por la ciencia.
Y tal ha sido el impacto de este tipo de instituciones que con tan solo mirar los frutos de proyectos para la creación de medicamentos, podemos considerar cómo Cuba manejó, por ejemplo, la pandemia provocada por la Covid-19.
En el caso del CIGB de Camagüey, además del Gavac, un medicamento para el control de las garrapatas en el ganado bovino, tiene desde hace varios años establecido en el mercado el bionematicida biológico HeberNem, el cual se utiliza para el manejo de poblaciones de nemátodos en varios cultivos.
Sin embargo, para el colectivo las proyecciones dirigidas a la obtención de candidatos vacunales en el combate al cáncer de próstata hasta el control de ectoparásitos en peces, pasan por la agenda prioritaria de acciones. Cuba y Camagüey en particular, pueden presumir en la actualidad de un CIGB, cuyo grupo de trabajo no descansa, mucho menos en la víspera del 26 de Julio, una fecha que marca además de la rebeldía, el camino científico de la mayor de las Antillas.
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