En el acto por el 70 aniversario del llamado Día de la Rebeldía Nacional, en la Universidad de Panamá, el diplomático evocó al líder de aquel movimiento y de la Revolución triunfante en 1959, Fidel Castro, cuando señaló que la gesta era apenas el inicio de la batalla por la definitiva liberación del pueblo.
Antes de presentar el filme Ciudad en Rojo, de la realizadora santiaguera Rebeca Chávez, como parte del homenaje, Cairo destacó además la solidaridad de Panamá, manifiesta en aquellos dramáticos acontecimientos.
Al respecto citó el altruismo del entonces embajador del istmo en la isla, quien ofreció refugio y salvaguardó al joven asaltante José Ramón Martínez Álvarez, pese a presiones de la dictadura de Fulgencio Batista para que lo entregara.
Martínez Álvarez logró viajar a Panamá custodiado por el diplomático y luego fue uno de los 82 expedicionarios del yate Granma, en 1956. Cayó combatiendo en Alegría de Pío, en la Sierra Maestra, pero aquel gesto quedó grabado como una muestra de la simpatía y la amistad que unen a cubanos y panameños, en su lucha por la independencia, remarcó.
Cairo sentenció de otra parte que mientras exista el bloqueo genocida que impone Estados Unidos a Cuba, «habrán otros Moncadas que asaltar», en alusión a las palabras del presidente cubano Miguel Díaz-Canel en los actos centrales este miércoles por la efeméride en Santiago de Cuba.
En ese sentido, adelantó que como parte de la semana de conmemoración de la histórica fecha, el próximo domingo se realizará una caravana por las principales arterias de la capital istmeña, en rechazo a la hostil política.
La jornada concluirá, dijo con una fiesta cubana en homenaje a la efeméride y su legado de fe en la victoria.
En la actividad, otro de los oradores, el presidente de la Asociación Martiana de Cubanos Residentes en Panamá, Humberto Pérez, destacó que su patria no está sola y anunció que como parte de la solidaridad enviaron a La Habana cuatro contenedores con insumos médicos para beneficiar al sistema de salud.
A la velada asistió el embajador de Panamá en Cuba, Reynaldo Rivera, representantes de las legaciones diplomáticas en esta capital de Nicaragua, Bolivia, Rusia y Venezuela, así como miembros de organizaciones sociales, solidarias, políticas, estudiantiles y sindicales, entre otras.
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