La celebración de los 70 años del asalto a la fortaleza militar, protagonizado por Fidel Castro y sus jóvenes compañeros, ha sido la razón para ese despliegue numeroso y desacostumbrado por las calles santiagueras, convocados por la osadía que pasados unos 15 minutos de las cinco de aquella madrugada inició la gesta.
El ataque simbólico que hace 30 años realizan niños y adolescentes en esta fecha será el preámbulo para la conmemoración central, en la cual tomarán parte unos 10 mil hombres y mujeres en representación de los cubanos.
El espectáculo artístico realizado en el Teatro Heredia mostró el desarrollo cultural de la provincia y la presencia mayormente juvenil e infantil del talento que cultiva y fomenta la enseñanza artística, esa vertiente sumamente noble de la obra educacional de la Revolución cubana.
Los asistentes a la sala principal del coliseo estuvieron acompañados por el presidente, Miguel Díaz-Canel, y otros dirigentes del país, quienes también estuvieron presentes en la sesión solemne de la Asamblea Municipal del Poder Popular por los 508 años de la fundación de la villa.
La jornada final del Encuentro Caribeño de Solidaridad con Cuba y otras causas justas igualmente fue compartida, en el Teatro de la Universidad de Oriente, por el mandatario, quien les expresó la gratitud a esos militantes de la fraternidad, varios de ellos con notables trayectorias en ese ejercicio desinteresado de la condición humana.
Desde el comienzo de la semana, Díaz-Canel visitó sitios importantes de la urbe y en particular, el Museo y la Ciudad Escolar enclavados en el otrora enclave castrense, donde apreció las transformaciones constructivas y los adelantos tecnológicos en la muestra que recorre hitos de la hazaña.
Con el amanecer de este 26 de julio volverá a estremecerse la ciudad y los ecos de aquel domingo traerán las luces para continuar abriendo brechas en la oscuridad.
oda/mca