El presidente de esta nación Bashar Al-Assad dijo que los uniformados representan fuente de orgullo, honor y dignidad, y han demostrado que son hombres de confianza y garantes del presente y el futuro de la patria.
En palabras dirigidas a las Fuerzas Armadas, el mandatario destacó la fidelidad del ejército a la honorable historia de lucha de los antepasados.
Los regulares son la esperanza de la patria, un ejemplo de heroísmo y audacia, y siempre están a la altura de los desafíos que enfrenta el país, puntualizó.
Con esta ocasión, los altos mandos visitaron los monumentos conmemorativos de los mártires donde colocaron ofrendas florales, y estuvieron en los hospitales castrenses para estar al tanto del estado de salud de los heridos.
Durante actos y desfiles organizados en los cuarteles y unidades, los oficiales ratificaron la determinación de seguir luchando hasta expulsar el terrorismo y los ocupantes.
Desde su fundación en agosto de 1945, nuestro ejército ha mostrado gran valentía y profesionalismo en la defensa de su tierra ante los planes de dominación y colonialismo, indicaron.
Por su parte, los gobernadores y representantes de asociaciones populares y civiles visitaron las unidades militares donde saludaron a los regulares y rindieron homenaje a los caídos durante la lucha contra el terrorismo.
Siria creó su ejército nacional el 1 de agosto de 1945, y el mismo fue entrenado y formado para defender las fronteras y enfrentar a Israel.
A partir de 2011 se enroló en una lucha contra decenas de miles de terroristas apoyados por potencias occidentales y regionales, logrando liberar la mayor parte del territorio nacional, fortalecer alianzas estratégicas con los ejércitos amigos, en particular de Rusia y China.
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