Desde julio el legislativo comunitario expresó su inquietud por lo que calificó de retroceso democrático, y llamó al gobierno de ese país a retirar o suspender la normativa hasta que sea enmendada.
Varsovia argumenta que su ley busca combatir la influencia rusa, no obstante el mecanismo comunitario introdujo meses atrás un expediente sancionador contra la nación bajo el argumento de que la norma no incluye mecanismos que permitan a los castigados recurrir a la justicia si son considerados cómplices de injerencia.
En tanto las voces críticas en el país ven en la nueva normativa un instrumento para anular a representantes claves de la oposición, incluido el ex primer ministro y líder del partido Plataforma Cívica, Donald Tusk.
La portavoz de la Comisión Europea, Anita Hipper, dijo que el instrumento legal preocupa al bloque regional pese a las enmiendas introducidas y firmadas la víspera por el presidente Andrzej Duda.
De su lado el comisario europeo Didier Reynders envió una carta, indicando que aunque con los arreglos se perseguía mejorar la ley, el documento no deja de suscitar una seria preocupación, en particular, en el aspecto del acatamiento de las normas de la UE.
Las relaciones entre Rusia y Polonia empeoraron mucho durante los últimos años, entre otros temas por acusaciones desde Moscú por lo que consideran “rusofobia desmedida”.
Además el país eslavo refutó en más de una ocasión acusaciones occidentales de intromisión en las elecciones y asuntos de otros Estados, calificándolas de infundadas.
Hoy Polonia es punta de lanza de la UE en la arremetida occidental contra Rusia tras el despliegue militar especial en febrero de 2022 en el Donbass.
Como miembro de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) el ejecutivo de Varsovia lidera el emplazamiento de nuevos efectivos de la alianza militar en la zona como parte de un cerco expansivo denunciado por Moscú en su momento.
No obstante sus desacuerdos con la UE sobre temas relativos a derechos humanos y libertad de expresión escalan a niveles elevados por momentos.
Tal situación llevó a analistas a expresar que Estados Unidos utiliza a Polonia como vía para dividir y debilitar al mecanismo comunitario.
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