En las últimas horas, la entidad incorporó a Haut-Rhin, Territoire de Belfort, Haute-Saône, Côte-d’Or, Nièvre, Drôme, Ardèche, Aveyron y Haute-Garonne a la alerta naranja, la cual abarca del suroccidente al sureste de la geografía francesa.
La madrugada pasada fue la más cálida del verano, al situarse por encima de los 20 grados centígrados en muchos territorios, ola de calor cuyo pico se prevé para el lunes o el martes de la semana entrante, con el termómetro que superará los 40 en diversos lugares.
El gobierno activó el jueves una célula de crisis y puso a disposición del público una línea telefónica para los casos de emergencia.
Hace 20 años la canícula cobró 15 mil vidas en Francia, lo que explica la preocupación por las consecuencias del actual episodio, sobre todo para la salud de las personas más vulnerables.
Según Météo France, en ciudades como Lyon, Toulouse, Avignon, Annecy, Albi y Montélimar el mercurio rondará este sábado los 37-38 grados centígrados.
El llamado de las autoridades es a mantenerse hidratados y a vigilar a las personas mayores y las afectadas por enfermedades crónicas.
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