Aunque se dedica una atención significativa a las muertes en el mar, las historias compartidas por los migrantes sugieren que varias tragedias pasan desapercibidas, especialmente durante el cruce del desierto del Sahara, declaró Liljert a la agencia Swissinfo.
Según datos del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), unas 186 mil personas arribaron en lo que va de año por vía marítima a Italia, Grecia, España, Chipre y Malta.
Además, Liljert apuntó que Grecia registró un aumento del 300 por ciento en las llegadas de desplazados del presente año, y que en Italia casi se duplicó de las 70 mil de 2022 a las 130 mil actuales.
En ese sentido, señaló que el conflicto en Sudán provocó la llegada tan solo en agosto pasado de casi mil 300 sudaneses a Túnez, uno de los principales puentes de África hacia Europa.
Desde Libia, el número de personas que intenta hacer la misma ruta es de 45 mil, de los que 10 mil 600 han sido rescatadas, interceptadas o desembarcadas en Libia, mientras el dato para Túnez asciende hasta los 31 mil personas.
Liljert también expresó preocupación por la creciente discriminación y la xenofobia hacia los migrantes, y advirtió sobre un aumento de estos viajes debido al incremento de conflictos, desastres naturales y la pobreza.
Por esta razón, recomendó a la comunidad internacional tomar medidas no solo para impedir las salidas, sino que tener en cuenta los diversos motores de la migración.
jha/amp