Según la prensa gala, 14 terminales aéreas recibieron hoy amenazas, y al menos ocho procedieron a evacuar, un proceso tenso, que implica la movilización de fuerzas especializadas de la Policía, por ejemplo en desminado, y vuelos cancelados o retrasados.
De acuerdo con una publicación del diario Le Figaro, este jueves los aeropuertos afectados fueron los de Béziers, Brest, Bordeaux-Mérignac, Carcasona, Montpellier, Nantes, Rennes y Tarbes, lista que incluye a grandes ciudades como Nantes, Montpellier y Burdeos y más pequeñas, entre ellas Tarbes.
La víspera, una decena de instalaciones tuvo que ser evacuada, en un contexto que el Gobierno considera la “importación” de la escalada de la violencia en el conflicto palestino-israelí.
En su cuenta en la red social X, el ministro de Transporte, Clément Beaune, mencionó denuncias por cada una de las amenazas de bomba, alegando que el ejecutivo no las toma a la ligera.
Se trata de un delito que será sancionado, afirmó el funcionario.
Encuestas reflejan la preocupación de los franceses, mientras el Gobierno aumentó las medidas de seguridad, entre estas el despliegue adicional de siete mil soldados de la operación antiterrorista Sentinelle.
El asesinato el pasado viernes del profesor Dominique Bernard durante un ataque con cuchillo en la norteña ciudad de Arras, donde además tres personas sufrieron heridas, elevó la vigilancia de las autoridades y motivó el llamado a la unidad del presidente Emmanuel Macron.
mgt/wmr
