La sede diplomática emitió un comunicado en el que calificó tales «acusaciones» de «absolutamente infundadas».
El pronunciamiento subrayó que tales advertencias de Washington, divulgadas por medios de prensa, «no continenen ninguna prueba».
Rusia siempre respeta (la) libre expresión de la voluntad de los ciudadanos de cada país y está dispuesta a trabajar con cualquier gobierno elegido democráticamente, enfatiza el pronunciamiento.
Añade que tal comportamiento Rusia lo cumple «a diferencia de la práctica tradicional de las elites políticas y estructuras financieras norteamericanas de apoyar directamente a ciertas fuerzas políticas en otros Estados.
En tal sentido, la embajada manifestó que Rusia “no practica en su política” la “organización de ‘revoluciones de colores’ y ‘golpes de Estado’, como lo hacen algunos otros países que son bien conocidos”.
La declaración afirma que la filtración de esas informaciones «“confunde al público uruguayo y latinoamericano” y lo “distrae de sus problemas candentes”.
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