El mandatario impuso la orden Félix Varela de Primer Grado a la primera bailarina y directora del BNC, Viengsay Valdés; al historiador de esa agrupación, Miguel Cabrera; al director del Museo de la Danza, Pedro Simón, y al diseñador escénico y gráfico del BNC, Ricardo Silvio Rey.
Durante la ceremonia, el presidente de la Asamblea Nacional del Poder Popular (Parlamento), Esteban Lazo, entregó la orden Juan Marinello, por su aporte extraordinario al desarrollo artístico, al subdirector de la compañía de Ballet Redento Morejón y a la directora de la Cátedra de Danza Miriam Vila.
El secretario de Organización del Partido Comunista de Cuba, Roberto Morales, impuso la medalla Alejo Carpentier a los primeros bailarines Mercedes Beltrán, Anett Delgado, Sadaise Arencibia, Gretel Morejón y al promotor José Ramón Rodríguez. Asimismo, la distinción por la Cultura Nacional, que reconoce la labor meritoria de personas que dedican sus vidas a la promoción, divulgación e investigación del BNC, fue entregada a la Jefa de Cátedra de Danza Mercedes Beltrán, al primer bailarín Yanquiel Velázquez, al pianista Keren Rodríguez y al promotor cultural Heriberto Cabezas.
También recibieron la distinción la bailarina principal Chavela Riera, las profesoras de la Cátedra de Danza Vilma García y Victoria Castellón, la asesora musical y directora de orquesta Idalgel Marquetti y el especialista de prensa Mauricio Abreu.
Al término de las condecoraciones, Viengsay Valdés recordó los orígenes del BNC de la mano de Alicia, Alberto y Fernando Alonso y aseguró que las nuevas generaciones sienten gratitud por ese legado, al que sirven cada día con su arte.
Asumimos la danza con responsabilidad, profesionalidad y entrega, afirmó Valdés, quien destacó que consolidar el rigor artístico de la compañía es la prioridad, para ofrecerle al público la excelencia que merece.
Esto, agregó, solo es posible con disciplina y constancia; valores heredados de nuestros próceres.
Recibimos estas distinciones con compromiso y humildad, con la voluntad de mantener y enriquecer un legado que manifiesta las esencias mismas de la identidad nacional, porque la nación es su cultura, subrayó la primera bailarina.
Hasta la fecha, no pocos son los homenajes y las muestras de cariño que el pueblo cubano le dedica al BNC, en retribución a tantos años de talento y entrega a un público que alrededor del mundo lo premia con ovaciones y aplausos.
Con maestría y humildad en sus pasos, la agrupación ascendió hasta colocar su nombre en una posición de mérito, reservada para aquellos comprometidos con la defensa de su arte y el de su país.
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