Un comunicado de ese grupo precisó que el bloqueo económico, comercial y financiero es el centro de la política de la Casa Blanca hacia 11 millones de cubanos en una guerra no declarada que no cesó ni un día durante 63 años.
Destacó el mensaje «que esa política terrorista” trata de destruir a la Revolución cubana y sus esfuerzos por mejorar la calidad de vida del pueblo.
Cuba, a pesar de esos intentos de destruirla, es ejemplo de desarrollo en salud, educación, deporte y cultura. “Su amor por los más necesitados se expande con sus brigadas de batas blancas salvando vidas por todo el planeta”, sostuvo el comunicado.
El movimiento demandó que la Asamblea General de la ONU apruebe la solicitud cubana de suspender el bloqueo y a la Casa Blanca de sacar a la isla de la lista de países que patrocinan el terrorismo internacional”.
Este miércoles la embajadora de El Salvador en Naciones Unidas, Egriselda López, llamó a revertir la medida, al intervenir a nombre del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) en el debate sobre el tema “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América contra Cuba”.
“Debe cesar de inmediato –destacó- la infundada categorización de Cuba como un país terrorista, lo cual ha ocasionado costos y consecuencias incalculables para la economía cubana, recrudeciendo el impacto del bloqueo, sobre todo para su pueblo”.
Asimismo precisó que los centroamericanos solo recibieron solidaridad, calidez y humanidad de la isla con sus brigadas médicas y sus aportes a la región.
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