En la segunda jornada de las discusiones en la cámara alta sobre el proyecto de ley de reforma migratoria, la derecha hizo valer su mayoría para materializar su conocido objetivo de convertir la AME en una Ayuda Médica de Urgencia (AMU), un paso cuestionado aquí por defensores de los derechos humanos.
Antes de los debates, el gobierno había expresado su voluntad de preservar ese apoyo, en una iniciativa enfocada en endurecer los requisitos de acogida y en facilitar la expulsión de personas en condición irregular, en particular las que representan una amenaza por terrorismo o delincuencia.
La eliminación en el Senado de la AME -con el impulso del partido conservador Los Republicanos- tiene pocas posibilidades de ser ratificada en la Asamblea Nacional, la cual cuenta con la última palabra en Francia en el ámbito parlamentario.
Senadores de la izquierda fustigaron la medida, ya que la AMU propuesta solo garantiza tratamientos de enfermedades graves y dolores fuertes, cuidados por embarazo, vacunaciones reglamentarias y exámenes preventivos.
Suprimir la AME es condenar a muerte a seres humanos vulnerables, denunció la legisladora socialista Anne Soruyris.
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