Roberto Villocht, director de la Oficina del Conservador en la villa espirituana, Monumento Nacional, aseguró a Prensa Latina que las instalaciones emblemáticas de los siglos XVIII y XIX recuperan todo su esplendor.
Explicó que la antigüedad Plaza de San Francisco y junto a la Parroquial Mayor, el puente sobre el rio Yayabo y el teatro Principal, conforman el conjunto patrimonial más relevante de de la zona colonial.
Las labores favorecerán también otras partes del centros histórico donde se agrupan instituciones recreativas, sociales y un amplio sector comercial estatal y privado.
Esta previsto el rescate integral del Corredor Cultural, la zona del bulevar y antiguos palacetes y casas del siglo XIX en las calles que concurren en el Parque Serafín Sánchez.
Sobre las obras en los altos de la Plaza del Mercado, comentó: mantienen buen ritmo, tendrá un salón de Convenciones, el cual mantendrá sus características coloniales sin apartarnos de aspectos de la modernidad.
Mientras en Trinidad, Patrimonio Cultural de la Humanidad, los preparativos para la festividad en enero del 2024 marcha sin detenerse bajo el eslogan Nuestra ciudad, nuestra esencia, afirmó Tania Gutiérrez, presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular.
La zona histórica de La Trinidad de Cuba es fascinante para quienes la visitan con un hálito más bohemio en busca de distracción, de conocimiento, de intercambio con los habitantes, entre ellos los dispuestos a escuchar una buena canción trovadoresca o un golpe de tambor en el Palenque de los Congos Reales.
Analizó que se materializarán numerosas iniciativas que tienen como protagonistas a los habitantes de esta ciudad, joya arquitectónica de Cuba y el Caribe.
Se trabaja en la reanimación del museo del sitio San Isidro de los Destiladeros y la Casa Frías, sede de la maqueta de la villa, en la rehabilitación de la Calle Independencia, parte del proyecto Arquitectura sin Fronteras, de la Junta de Andalucía.
La reparación de los accesos a la Plaza Mayor –corazón de la zona colonial- resalta también entre las labores para retocar sus encantos, donde están los principales museos y templo religioso.
Unido a estos proyectos la Sucursal Extrahotelera Palmares prevé la modificación y apertura de inmuebles con diversos servicios, anunció su director Fredy Rendueles.
En la ciudad trinitaria el bar Yesterday se transformará en Mi Casita Infantil, un sitio destinado para que los niños tengan acceso a juegos interactivos y pasivos.
Un antiguo almacén se transformará en un bar temático que recree la década de los años 50 del pasado siglo y La plaza cultural Lico Jiménez, en el mayor centro recreativo de la localidad.
En Sancti Spíritus se trabaja en la ampliación la Taberna Yayabo, uno de los centros insigne de la sucursal, añadió Rendueles.
Además frente al Parque Serafín Sánchez se remozará el antiguo Café El Liana en un centro para servicios en diversas modalidades al turismo nacional e internacional.
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