Nadie permaneció indiferente en la sala del Complejo Cultural Lumen, que en su vestíbulo exhibió obras de reconocidos fotógrafos de la isla, entre ellos Roberto Chile.
Los artistas Ulises Mora e Irma Castillo con su proyecto Timbalaye ofrecieron una probadita del sincretismo cultural de la nación antillana, que entre sus escalas incluyó la rumba, manifestación inscrita en el Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
También conquistaron a los presentes la cantante Annie Garcés y el guitarrista Eduardo Corcho con un recorrido por la música cubana de ayer y de hoy, mediante los temas La Bayamesa, Venga la esperanza, 20 años, Sábanas blancas y Cuba que linda es Cuba, coreada por muchos en el espacio Lumen.
El cierre corrió a cargo del grupo Tumbao Cubano con la propuesta del son y la invitación a bailar, la que aceptó el público multinacional, integrado por delegados al tribunal internacional que sesiona hasta mañana en el Parlamento Europeo para juzgar el bloqueo estadounidense contra el país caribeño.
Al ritmo de la Guantanamera, los artistas compartieron escenario en la despedida, con todos de pie en una velada hermosa de tradiciones y solidaridad.
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