Se trata de una herramienta para la toma de decisiones en diferentes niveles que se ejecuta desde 2018 en 30 municipios de 15 provincias cubanas, incluyendo 15 áreas protegidas, 10 polígonos de suelo, agua y bosque, establecimientos pesqueros, polos turísticos y en dos empresas de hidrocarburos.
Explicó Aylem Hernández, directora del proyecto y funcionaria del Centro Nacional de Áreas Protegidas, que dicha iniciativa persigue contribuir al desarrollo ambiental, económico y social del país a través de marcos legales, políticos e institucionales en sectores claves.
Tambien este lunes representantes de la isla caribeña lanzaron en el Pabellón de Cuba de la COP 28, que sesiona en Emiratos Árabes Unidos, la alianza internacional para la circularidad de una agroindustria de la caña de azúcar resiliente y baja en carbono.
La ministra de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente de Cuba, Elba Rosa Pérez, destacó la importancia de avanzar en el logro de una agroindustria azucarera resiliente y baja en carbono, basada en los conocimientos derivados de la ciencia, la tecnología y la innovación para contribuir a erradicar la pobreza y elevar el nivel de vida de los pueblos.
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