Estas medidas funcionaron y nuestra lucha contra quienes arriesgan vidas humanas para cruzar ilegalmente la frontera demostró su eficacia, afirmó la ministra en una entrevista con el periódico Rheinische Post.
La medida fronteriza se introdujo el 16 de octubre y se extendió por última vez hasta el 15 de diciembre, con lo cual en los últimos casi dos meses, se han impedido tres mil 300 cruces fronterizos ilegales.
Según la Oficina Federal de Migración y Refugiados, más de 300 mil solicitantes de asilo llegaron a Alemania desde principios de 2023 hasta finales de noviembre, un 60 por ciento más que en el mismo período de 2022.
En el otoño de 2023, el Gabinete alemán aprobó varias medidas que endurecen las leyes de inmigración y deberían hacer que la nación germana sea menos atractiva para los inmigrantes ilegales.
Ahora los refugiados necesitarán vivir en el país durante 36 meses para recibir los beneficios sociales estándar, 18 meses más que antes.
El beneficio se transferirá a una tarjeta de débito para que los extranjeros puedan gastar dinero en Alemania en lugar de transferirlo a familiares en el extranjero.
Mientras, se reducirán los tiempos de procesamiento de las solicitudes de asilo.
También hay planes para facilitar la deportación de aquellos cuyas solicitudes no prosperen.
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