Según la pesquisa de la Dirección de Investigación, Estudios, Evaluación y Estadísticas (Drees) del gobierno, el 31 de diciembre del año pasado se contabilizaban 374 mil 290 camas en dos mil 976 establecimientos de salud, de ellos mil 338 hospitales públicos, 980 clínicas privadas y 658 centros privados sin ánimo de lucro.
El retroceso del 1,8 por ciento en la disponibilidad de espacios para acoger a pacientes representa un incremento respecto al 1,4 registrado en 2021, y mayor aún que el reportado antes de la pandemia de la Covid-19, con una media anual del 0,9 por ciento.
En cuanto a las camas para atender a personas en estado crítico, el estudio recoge que después del aumento del 3,6 por ciento en 2020 para responder a la crisis sanitaria, fueron reducidas en 1,7.
Particular impacto sufrió la cantidad de camas para pacientes en reanimación, la cual disminuyó un 4,7 por ciento en 2022, aunque sigue siendo superior a la existente en 2019.
La investigación del Drees muestra el aumento en la capacidad parcial en los centros de salud, que cuentan en total con 85 mil 15 espacios de este tipo, dos mil 591 creados el año pasado.
Estas camas no implican pasar la noche en hospitales o clínicas, pero sí permiten atender a una mayor cantidad de pacientes en condición ambulatoria.
Desde diversos sectores critican el cierre de camas en Francia, que en el período 2016-2022 ascendió a casi 30 mil.
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