Según la organización sin ánimos de lucro que reúne a expertos, los datos recopilados de manera preliminar muestran que el principal aporte en esa disminución fue en la producción de energía (9,4 por ciento), la industria (9.3) y la construcción (7,5).
Respecto al transporte, la fuente, citada por el diario Le Figaro, registró una contribución más modesta a la lucha contra el cambio climático, con 1,8 por ciento de reducción de las emisiones de gases como el dióxido de carbono.
En el caso de la agricultura, el Citepa señaló que no están disponibles evaluaciones preliminares.
El objetivo de Francia es disminuir a la mitad las emisiones de gases de efecto invernadero a la atmósfera para el 2030, tomando como referencia a 1990, meta anunciada en mayo por la primera ministra Élisabeth Borne.
La baja en la liberación de contaminantes había alcanzado un 4,3 por ciento en el primer semestre, después de caer un 2,7 en 2022.
Hace pocos días culminó en Dubai la conferencia sobre el cambio climático COP28, foro que ratificó la amenaza del cambio climático para la humanidad.
La reunión dejó un acuerdo que implica la transición energética sin combustibles fósiles, iniciativa celebrada por el gobierno francés y en particular por el presidente Emmanuel Macron, quien instó a triplicar las energías renovables y a reconocer el papel de la nuclear.
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