Nacido en Santiago el 11 de agosto de 1941, el realizador fue detenido luego del golpe de Estado de 1973 y logró salir al exilio y salvar la trilogía La batalla de Chile, que se editó con la colaboración del Instituto Cubano del Arte e Industrias Cinematográficos.
Este filme, considerado como el mejor documental chileno de todos los tiempos, constituye un testimonio de la efervescencia vivida en el país durante el gobierno de Salvador Allende (1970-1973) y ganó seis grandes premios en Festivales de Europa y América Latina.
Guzmán tiene una extensa filmografía, con alrededor de una veintena de películas, entre las que figuran, además, Chile, la memoria obstinada (1997), El caso Pinochet (2001), Salvador Allende (2004), Nostalgia de la Luz (2010), El botón de nácar (2015) y La Cordillera de los sueños (2019).
A lo largo de su carrera, ha obtenido muchos lauros internacionales, aunque para él “un premio que recibes en tu patria es más importante que los otros”.
Se trata de uno de los exponentes más importantes del cine documental de este país, señaló el jurado del Premio Nacional de Artes de la Representación y Audiovisuales 2023.
Añadió que con su poesía cinematográfica, Guzmán “nos habla de la importancia de la memoria para reencontrarnos con el presente e imaginar un futuro”.
La ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio y presidenta del jurado, Carolina Arredondo, destacó la decisión del cineasta de poner en Chile y en la ruptura de la democracia el foco de su obra, lo cual tiene un significado especial en el año en que se cumplió medio siglo del golpe de Estado.
Los premios nacionales comenzaron a otorgarse aquí en 1942 con los de literatura y arte y luego se fueron introduciendo nuevas disciplinas hasta llegar a 11.
Este 26 de diciembre, en una ceremonia en el Palacio de La Moneda, el presidente Gabriel Boric entregó los galardones a seis personalidades.
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