Según el sondeo realizado por Elabe para la cadena BFM TV, con la participación de un millar de electores, seis de cada 10 entrevistados descarta un cambio de método o estilo con el nombramiento del político de 34 años, quien al sustituir el martes a Élisabeth Borne se convirtió en el jefe más joven del Palacio de Matignon en la V República (desde 1958).
Sin embargo, un para nada despreciable 41 por ciento reaccionó de manera positiva a la designación de Attal, cuyo Gobierno fue anunciado anoche, con el mantenimiento de pesos pesados y un giro a la derecha, en buena medida por la llegada al puesto de titular de Cultura de la conservadora Rachida Dati, otrora ministra de Justicia bajo Nicolas Sarkozy.
En mayo del 2022, cuando Borne asumió al frente de Matignon, un 36 por ciento de franceses había celebrado el nombramiento.
También notable es el hecho de que tres de cada 10 encuestados por Elabe se mostrara “indiferente” a la llegada de Attal al cargo.
Macron apostó por la “regeneración” al designar al exministro de Educación, en una maniobra criticada por la izquierda y la extrema derecha y recibida con cautela por los conservadores.
Se espera que a inicios de la próxima semana el jefe de Estado realice una intervención para explicar al país sus proyecciones con el nuevo Gobierno, que enfrentará desafíos como la ausencia de la mayoría absoluta en la Asamblea Nacional, las elecciones europeas de junio y los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París-2024 en el verano.
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