África constituye una parte esencial de la historia, la cultura, la religión y la nacionalidad cubanas, tras siglos de vínculos identitarios, solidaridad y hermandad, plasmó el canciller Rodríguez en su perfil en la red social X.
Las relaciones políticas entre Cuba y África surgieron desde el triunfo de la Revolución, en 1959, y se sustentan en bases de solidaridad y respeto mutuos.
Combatientes cubanos colaboraron en las luchas por la independencia de varios países de ese continente y contra el Apartheid, e internacionalistas de la isla colaboran allí en las esferas de la salud, deportiva, profesional y técnica, entre otras.
La nación antillana forma en sus centros de altos estudios recursos humanos para el desarrollo de las naciones africanas.
El llamado continente negro tiene una posición sólida contra del bloqueo que impone Estados Unidos a la isla caribeña desde hace más de seis décadas, y aboga por el respeto al derecho de Cuba a su autodeterminación, independencia y soberanía.
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