En medio del bloqueo de autopistas en reclamo de mejores condiciones de trabajo, incluyendo de algunos accesos a París, y de episodios aislados de violencia, el mandatario mencionó en Montastruc-de-Salies una ayuda de urgencia de 50 millones de euros para la filial biológica del campo y la simplificación de trámites y de asistencias.
De acuerdo con Attal, serán aplicadas sanciones severas contra tres empresas, las que no precisó, por incumplir la ley que protege la remuneración de los agricultores, quienes denuncian bajos salarios, el impacto de la inflación, el aumento del precio del combustible, la competencia desleal y las normas ambientales europeas, que tildan de muy severas.
También destacó la reducción de trámites burocráticos, otra de las demandas del movimiento de contestación, y encargó a las autoridades locales trabajar con el sector en ese sentido.
Respecto al acuerdo entre la UE y el Mercado Común del Sur (Mercosur), subrayó que Francia seguirá oponiéndose al mismo.
Diversos reportes dan cuenta de que en algunas ciudades comenzaron a retirarse los tractores que bloqueaban autopistas, sin embargo, es muy pronto para saber cuál será la reacción de los agricultores.
Según fuentes del movimiento, más de 70 mil personas participan en las protestas en 85 de los 96 departamentos del territorio metropolitano, donde se registró hoy el incendio de una aseguradora agrícola en la sureña ciudad de Narbona, hecho al parecer con carácter intencional.
El presidente de la Federación Nacional de Sindicatos de Agricultores de Francia (Fnsea), Arnaud Rousseau, declaró más temprano que el gremio responderá a los anuncios del primer ministro sobre las 20:00, hora local, después de consultar a sus bases.
Rousseau insistió en la necesidad de que la reacción del ejecutivo sea concreta y esté a la altura de las reivindicaciones, esgrimiendo que el movimiento mantendrá la movilización hasta que haga falta.
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