Consultados por la firma Pulso Ciudadano, 76,6 por ciento dijeron estar de acuerdo o muy de acuerdo con cambiar el sistema de jubilaciones, mientras que 9,4 manifestaron lo contrario y 14 no expresaron una opinión clara al respecto.
Además, 52,6 de cada 100 entrevistados calificaron como malo o muy malo el desempeño de las AFP, 34,6 lo evaluó como regular y solo 12,7 lo aprobó.
El modelo previsional en Chile fue gestado en 1980, en tiempos de la dictadura de Augusto Pinochet (1973-1990), y en la actualidad hay más de 11,6 millones de afiliados a las siete AFP existentes, que lucran con los ahorros de los trabajadores y pagan míseras pensiones.
La propuesta de reforma, presentada por el Gobierno ante el Parlamento, aboga por crear un sistema mixto que permita aumentar los retiros, 72 por ciento de los cuales son inferiores al salario mínimo y la cuarta parte están por debajo de la línea de pobreza.
La iniciativa plantea también que del seis por ciento adicional que deben aportar los patronos al fondo de jubilaciones, la mitad vaya a las cuentas particulares de los trabajadores y el resto a un mecanismo de solidaridad para incrementar cuanto antes los retiros más precarios.
Interrogados sobre el tema por Pulso Ciudadano, 46,2 por ciento consideran que el total debe ir a su cuenta individual, 13,4 a un sistema de reparto y 24 se inclina por una fórmula mixta entre capitalización y un fondo solidario.
El sondeo se publica después de que la Cámara de Diputados aprobó legislar sobre el proyecto del Ejecutivo, el cual pasó al Senado, donde será revisado por las comisiones de Trabajo y Hacienda antes de ser sometido a la votación del plenario.
jcm/car