Según el directivo de la entidad Christophe Fanichet, circulará uno de cada dos Trenes de Gran Velocidad (TGV) Ouigo y lo mismo para los viajes regulares interciudades, mientras las operaciones internacionales sufrirán cancelaciones en una magnitud aún por precisar.
Los clientes fueron alertados esta tarde sobre la anulación o no de su periplo, en un fin de semana particularmente sensible, al representar la partida de las familias para las vacaciones escolares.
Sindicatos como la Confederación General del Trabajo (CGT) y Sud Rail convocaron al paro a más de ocho mil controladores para exigir la revalorización de primas, una decisión que genera polémica por la época en que se produce.
El primer ministro Gabriel Attal señaló que si bien acudir a la huelga es un derecho, trabajar constituye un deber, deplorando que se acuda a la misma con frecuencia en momentos sensibles para los franceses.
Sin embargo, el directivo de la CGT-Ferroviarios Axel Persson argumentó que la protesta del fin de semana responde a incumplimientos por la SNCF de las reivindicaciones del gremio.
La empresa aseveró por su parte que respondió a las demandas de los trabajadores y prometió atenuar en lo posible las afectaciones por la cancelación de trenes.
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