Desde bien temprano en la mañana, decenas de tractores llegaron al periférico capitalino con destino a la Puerta de Saint-Cloud y el objetivo de plantarse en la céntrica plaza Vauban, muy cerca del Palacio de los Inválidos.
La acción provocó al menos 40 kilómetros de embotellamiento, en un aviso al ejecutivo de que los agricultores van en serio en sus advertencias de que la edición 60 del Salón es el momento para que se concreten sus anuncios y promesas.
No será la única movilización de este viernes, ya que sindicatos prevén llegar en la tarde con unos 50 tractores a las inmediaciones de la Puerta de Versalles, donde se ubica el recinto ferial que acogerá del 24 de febrero al 3 de marzo el Salón de la Agricultura, un evento internacional al que suelen acudir decenas de miles de personas cada año.
El presidente Emmanuel Macron sostendrá mañana en el tradicional foro un encuentro con líderes sindicales del sector, en el que tratará de calmar la cólera del gremio.
Esta semana, el primer ministro Gabriel Attal detalló en una rueda de prensa los tres paquetes de medidas presentados por el gobierno ante un movimiento que lo puso en jaque en la segunda mitad de enero con el bloqueo de autopistas, en reclamo de mejor remuneración, menos burocracia y protección frente a la competencia desleal y las desigualdades en las relaciones comerciales.
Attal señaló el miércoles que la agricultura estará entre los intereses fundamentales de la nación, al nivel de los asuntos de seguridad, y abordó temas como el fortalecimiento de la legislación, la exoneración de cotizaciones, la simplificación de trámites y el combate a la competencia desleal.
No les mentiremos y no les traicionaremos, los agricultores quieren ver para creer, dijo entonces.
Organizaciones como la Federación Nacional de Sindicatos de Agricultores de Francia (Fnsea), la Confederación Campesina y Los Jóvenes Agricultores reconocieron avances, pero insistieron en que es hora de materializar los anuncios y las propuestas.
En ese sentido, insistieron en que el Salón de la Agricultura de París con la presencia en el mismo del jefe del Estado es la ocasión para satisfacer las demandas, o al menos poner en marcha las respuestas.
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