Desarrollado por el Instituto de Células Madre Humanas de este país, de conjunto con la compañía Betuvax, el fármaco avanza en las pruebas de fase I-II que se llevarán a cabo en 170 pacientes, de acuerdo con el protocolo aprobado por el Ministerio de Salud, indicó la agencia de noticias TASS.
Los participantes en los ensayos recibirán dos componentes del prospecto con un intervalo de 28 días.
El director general de la empresa de investigación KEG BIO, Nikolái Kriuchkov, explicó que los primeros 20 candidatos seleccionados recibirán el fármaco real, mientras que el uso de placebo está previsto para las siguientes fases de los ensayos.
Según los especialistas, el uso de Betuvax debe provocar efectos secundarios mínimos debido a su composición particular.
‘Solo contiene los antígenos de superficie del coronavirus, lo que reduce el contenido de proteínas y, por tanto, la alergenicidad del medicamento’, señaló la empresa.
Agregó que el candidato no contiene virus, material genético en forma de ADN y ARN, carga antigénica excesiva, conservantes adicionales, estabilizadores ni adyuvantes inorgánicos, lo que minimiza los riesgos de efectos secundarios.
Destacaron que los ensayos preclínicos en animales el Betuvax-CoV-2 (su nombre hasta el momento) mostró un buen perfil de seguridad y eficacia con la formación de altos títulos de anticuerpos neutralizantes contra el coronavirus.
Al fármaco le señalaron buenos resultados como vacuna para personas mayores, niños y revacunaciones, debido a la expectativa de reacciones adversas menos agresivas.
Rusia ya cuenta con las vacunas antiCovid-19 Sputnik V, EpiVacCorona, CoviVac y Sputnik Light, el primer componente de la primera con muy buenos resultados como inmunizante independiente.
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