Según una investigación internacional Gabriel Abaroa, expresidente emérito y director ejecutivo del grupo que otorga los premios musicales, ‘habría sido sobornado con un millón de dolares para reconocer la obra como Canción del Año’.
De acuerdo con un artículo publicado en el periódico Granma, ‘dicha entrega monetaria a Abaroa se canalizaría a través de varias offshore ubicadas en Islas Vírgenes’ (Británicas) y, con ello, pretendían legitimar el contenido de Patria y Vida, cuya factura ‘trastoca esencias, engaña de forma malsana, manipula conciencias e intenta la fragmentación’.
Otras publicaciones y analistas, como el portal mexicano Bendito coraje, refieren que ‘la investigación periodística conocida como los Pandora Papers descubrió pagos de Atlas Network, empresa detrás de la financiación y promoción en redes sociales de la canción Patria y Vida».
La ceremonia prevista para el próximo 18 de noviembre aupará al tema de marras como parte de la politización total de un evento artístico subordinado a los intereses de la ultraderecha de Miami y el Gobierno de Estados Unidos, que incitan al ‘desánimo, el incordio y el derramamiento de sangre entre cubanos,’ advirtió el texto periodístico.
El rapero Yotuel Romero, el cantante y compositor Descemer Bueno, y el grupo Gente de Zona se unieron a Maykel Osorbo para lanzar la pieza, la cual sirve como instrumento para la guerra de cuarta generación en marcha, gestionada y financiada desde el ámbito cultural que tergiversa la verdad de la Revolución cubana.
mgt/chm