El miembro del secretariado del Comité Central del PCC y responsable de su Departamento Ideológico, Rogelio Polanco, mostró la grabación de una conversación entre Yunior García, uno de los principales artífices de la manifestación, y Ramón Saúl Sánchez, quien fuera miembro de organizaciones terroristas como Omega-7, Alpha 66, Frente Nacional de Liberación de Cuba, entre otras.
Durante el intercambio Sánchez, actual director del Movimiento Democracia, asentado en Estados Unidos, expresó su total respaldo y admiración a García.
Además, le ofreció ayuda logística y de propaganda en medios de comunicación norteños y le propuso la realización de una flotilla para apoyar la acción desestabilizadora en noviembre próximo.
Polanco recordó que Ramón Saúl Sánchez fue segundo jefe de la Coordinación de Organizaciones Revolucionarias Unidas (CORU), la cual realizó más de 90 ataques terroristas contra instalaciones cubanas en varios países y participó en la voladura en 1976 en Barbados del avión que transportaba a deportistas de la isla.
Asimismo, el dirigente mencionó los vínculos de García y el cubano Manuel Cuesta, también promotor de la marcha, con el Centro para la Apertura y el Desarrollo de América Latina (Cadal), cuya sede está en Argentina.
Esta organización recibió de la estadounidense Fundación Nacional para la Democracia (NED) un financiamiento de 107 mil dólares en 2017 y 100 mil dólares en 2021 destinados al proyecto Un Enfoque Regional para Promover Valores Democráticos en Cuba, subrayó Polanco.
Agregó que García y Cuesta participaron en 2018, organizado por Cadal, en el proyecto Tiempos de Cambio y el nuevo rol de las Fuerzas Armadas en Cuba, el cual abordaba posibles escenarios y aliados a futuro.
El programa promovía los vínculos que debían buscarse entre miembros o exmiembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias dispuestos a un proceso de ruptura política en el país.
Fuentes documentales muestran que ambos cubanos continuaron su preparación en 2019 en un taller de la Universidad San Luis, España, donde recibieron lecciones de Richard Youngs, experto en protestas públicas como método de cambio político, social y económico.
El especialista pertenecía a la Fundación Carnegie para la Paz Internacional, cuyo presidente en aquel momento era el actual director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) de Estados Unidos, Willian Burns.
En opinión de Polanco, entre los postulados de Youngs que se aplican en Cuba está la creación de nuevos tipos de campañas cívicas que fomenten el discurso de presos políticos, violencia y diálogo.
Agregó que también se evidencia la conformación de organizaciones, la creación de condiciones para generar nuevas movilizaciones, la explicación de acciones para evadir el enfrentamiento policial y garantizar la atención internacional.
Un artículo del sitio Cuba Money Proyect muestra que la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid) otorgó un monto superior a los seis millones de dólares a proyectos subversivos contra Cuba.
Sobre este particular, Polanco refirió que uno de los principales beneficiarios fue el denominado Directorio Democrático Cubano (167 mil 500 dólares) que dirige con base en la Florida, Estados Unidos, Orlando Gutiérrez.
En diferentes declaraciones, este hombre abogó por una intervención militar en la isla y actualmente apoya con numerosas iniciativas la marcha ilícita en Cuba, la cual considera puede provocar un cambio de régimen en la mayor de las Antillas.
Gutiérrez y Yunior García forman parte de la Plataforma Cuba Próxima, que fomenta la restauración del capitalismo en la nación.
‘No nos sorprende el apoyo a esta manifestación del núcleo mediático generador de odio, legisladores, medios de comunicación que alientan mensajes contra la Revolución, promueven asambleas de resistencia e intervenciones militares desde la Florida’, puntualizó Polanco.
El dirigente partidista señaló que la Fundación Nacional Cubana Americana, también asentada en Estados Unidos, orientó desde su página de Facebook cómo acudir y participar en la marcha.
Además, la cubana Sailí González, una de las promotoras de este intento desestabilizador, reconoció recientemente el respaldo a esta acción del director de Derechos Humanos de esa organización, Omar López.
Polanco ratificó que todo esto ocurre bajo la mirada cómplice del Gobierno estadounidense y rechazó nuevamente las últimas declaraciones de un alto funcionario de Washington, quien amenazó con nuevas sanciones a la isla si no se permitía la marcha ilícita.
El Partido Comunista de Cuba reiteró la alerta sobre la guerra no convencional o guion de golpe de Estado blando que se intenta aplicar en el país caribeño siguiendo los parámetros de una supuesta lucha no violenta.
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