Estas disposiciones, escribió Rodríguez en su cuenta en Twitter, constituyen una clara violación del Derecho Internacional y la Carta de la Organización de Naciones Unidas además de una injerencia en los asuntos internos de ese hermano país.
El portavoz del Kremlim, Dimitri Peskov, por su parte, calificó tales restricciones como ‘inaceptables porque dañan significativamente las ya deplorables relaciones’ tanto con la Unión Europea como con Estados Unidos.
Las nuevas sanciones contra ciudadanos y organizaciones de Rusia son una injerencia en los asuntos internos del país, dijo Peskov en recientes declaraciones.
Las disposiciones ocurren luego de las acusaciones europeas y estadounidenses que vinculan al Ejecutivo de Moscú con el supuesto envenenamiento del bloguero opositor Alexei Navalny.
En respuesta a estos señalamientos, el jefe de la oficina de prensa de la Presidencia rusa instó a Washington y al bloque europeo a compartir las evidencias que tuvieran para resolver el caso.
‘Si los estadounidenses y los europeos ocultaran esas supuestas evidencias que dicen tener, estarían encubriendo las razones verdaderas de toda esta historia u obstaculizando los propósitos de descubrir lo que realmente sucedió’, comentó.
mem/ebr
